Degradaciones monetarias en una perspectiva histórica

por Paulo De León, CABI

Artículo que sale en El Periódico. Pinche aquí.

La primera degradación monetaria moderna se dio en la Francia del siglo XVIII. Previo a ello, la historia nos cuenta que también hubo degradaciones, pero el hecho distintivo de la francesa es que es la primera con papel moneda. John Law, un fugitivo por homicidio escocés, llega a la Corte del Rey Luis XV tras su aprendizaje en Holanda (Dutch East Indies Company) de cómo los papeles de una empresa pueden llegar a valer tanto. Elabora su esquema mental, que para facilitar la transaccionalidad es mejor dejar atrás las monedas acuñadas de plata, oro y otros metales y pasar al papel. Evidentemente, un papel per se no vale nada, por ello estaba la convertibilidad o lo que llamamos los economistas anclas monetarias. Es decir, un papel que dice que vale 100 francos es convertible en una cantidad determinada de oro o de plata. Eso obligaba a que la autoridad relevante mantuviera en sus bóvedas la cantidad equivalente al dinero papel en circulación en el activo de respaldo. El Estado francés y en especial los gustos de la monarquía y burócratas iban en aumento y con niveles de despilfarro y derroche en vida de excesos cada vez más estrafalarios. John Law vio una oportunidad. 

Degradar (debase) una moneda es crear dinero de la nada, sin respaldo, sin convertibilidad o sin ancla. Como consecuencia de la degradación, la moneda sufre depreciaciones. Pero no todas las depreciaciones son causadas por degradaciones monetarias. 

Regresando a nuestro amigo escocés, su habilidad y su ingenio llegan a oídos de la Corte del Rey y lo nombra superministro. Y empieza a crear su esquema, primero creando dos bancos estatales que emitían el papel moneda con convertibilidad, pero para poder degradar la moneda se crea la empresa francesa de Luisiana que emite acciones para la expansión y las inversiones en el nuevo mundo; y los francos en papel pasarían a ser respaldados por acciones de la empresa francesa de Luisiana (Compañía Perpetua de las Indias). Con esto último, tiene el control de crear el papel moneda y el papel empresarial y empieza la fiesta. 

Grabados de la época que encontré muestran a John Law sentado en un trono cargado por unos soldados firmando y tirando papel moneda a la gente, que se pelean alegremente por recibir ese dinero “gratis”. El esquema genera un boom de consumo y de inversión y toma tiempo en explotar. Pero una vez que los burócratas entienden que pueden crear dinero de la nada y por ello adquirir lo que quieran, la situación se desborda. Y termina en una hiperinflación y por supuesto en el estallido de la burbuja y en una tremenda depresión económica. Historiadores como Niall Ferguson atribuyen esta degradación monetaria y sus efectos posteriores como el origen de la Revolución francesa años más tarde. 

Pero la historia de John Law y Francia no es la única, la hiperinflación alemana termina con la llegada de Hitler, la degradación vía limar monedas del Imperio romano termina con el colapso del Imperio romano de Occidente, la degradación de la libra esterlina para financiar la Primera Guerra Mundial termina en default. Al Imperio español también le sucede lo mismo, en especial cuando el oro y la plata entran desde América. Las degradaciones monetarias de la historia nunca terminan bien, y están detrás de cada uno de los cambios de liderazgo en las potencias mundiales y los colapsos de imperios. 

Milenios han pasado pero los burócratas de turno siempre encuentran su John Law, que les dice, esta vez es diferente, el mundo económico cambió, estamos ante un nuevo paradigma, o cualquier otro discursito bien vendido. Hoy la Modern Monetary Theory es ese esquema a la John Law que permea en las élites burócratas de EE. UU., incluida la Casa Blanca, como la misma autora de la MMT lo reconoció en una entrevista reciente. La impresión de billete desproporcionado por parte de la Fed para financiar el gasto excesivo ya tiene colaterales. La inflación más alta desde 1990 pero más importante que eso, la potencial pérdida de confianza y credibilidad de la Fed. Hoy la retórica del gasto público es que la economía tiene que ser rescatada para las personas aducen (The people´s economy) o lo que eso signifique. Para Francia la degradación de John Law trajo una revolución y el colapso del Imperio francés; eso sí, nos dejó Versalles para que los turistas gocen semejante obra, pero también veamos los excesos de los gobernantes y burócratas de ese entonces. La inflación es perniciosa, termina afectando a los más pobres; y no necesita que sea hiperinflación. El índice de precios de alimentos de la FAO ya toca el máximo de la historia y casi 35 por ciento arriba de lo que estaba antes de la pandemia en el 2019 para saltarnos el efecto base que algunos mencionan. 

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